[Alejandro Pellico Villar, egresado de Ingeniería Industrial ha desarrollado un modelo de gestión centrado en la persona.]
“Para mí ser UPAEP es ser una persona que busca el bien común y que las personas sean lo más importante sin importar cual sea tu actividad profesional”, así describió Alejandro Pellico Villar, egresado de Ingeniería Industrial generación 93-97 su sentir respecto a ser parte de la Comunidad UPAEP.
Actualmente es el Director y fundador de Solidarium, una empresa de consultoría para cuestiones de gestión estratégica centrada en el bien común; además es presidente de la Unión Social de Empresarios de México (USEM) en la Ciudad de México.
Señaló que decidió estudiar Ingeniería Industrial por la facilidad que tenía con los números y optó por hacerlo en UPAEP ya que le interesaba que hubiese un componente humanista en la técnica, ya que la Ingeniería Industrial era más dura.
“Me acuerdo que cuando llegué hubo un profesor que nos dijo: a partir de ahora el comer y dormir van a ser privilegios para ustedes y vaya que tenía razón; la escuela de Ingeniería Industrial era la mejor de Puebla y la región en aquel entonces y lo era por el altísimo nivel de exigencia que tenían los profesores”.
Explicó que gracias a este nivel de exigencia logró generar vínculos de amistad muy fuertes, mencionó que sus amigos más entrañables son los de la Universidad.
“Conviví con ellos en circunstancias de mucha presión, de mucho estrés; participamos en la sociedad de alumnos, creamos el Instituto de Ingenieros Industriales, hubo una camaradería y comunidad que hicimos padrísima, el recuerdo que tengo de la Universidad es de trabajo, exigencia y compromiso. Participamos en el área de relaciones externas, estábamos en diversos eventos de la Universidad; fue una experiencia de vida”.
Destacó que en gran medida participa en instituciones como USEM gracias a la conciencia social que sembró la formación de la Universidad en la necesidad de comprometerse con los demás y en el imperativo de trabajar por el bien común.
Alejandro mencionó que su camino profesional inició gracias a un proceso de reclutamiento que Burlington Industries llevó a cabo en la UPAEP
“Burlington Industries vino a hacer un proceso de reclutamiento en la Universidad, iban a abrir una planta de mezclilla en Yecapixtla, Morelos; sabían que la UPAEP egresaba buenos ingenieros industriales”.
Junto con algunos de sus compañeros se fue a Estados Unidos a un proceso de entrenamiento para venir a abrir la planta en Morelos, este proceso, comenta, duró muy poco para él, ya que se dio cuenta que no era lo suyo.
A su regreso se colocó en SKF de México, una fábrica de rodamientos que está a espaldas de la Central de Abastos, es una fábrica sueca y hace sobretodo rodamientos para la industria automotriz.
“Ahí implementé ingeniería industrial dura, tenía el puesto de Master Scheduler; de lo que me encargaba era de ver toda la cadena de producción, desde compra de componentes, programación de la producción, almacén de producto terminado, exportaciones, toda la cadena de valor de dos canales, ahí estuve dos años”.
Posterior a ello dirigió los trabajos de COPARMEX Puebla durante seis años; “fue un trabajo que me hizo crecer muchísimo, esta visión humanista práctica, esta visión por el bien común de una forma concreta, el trabajar por el mejoramiento de las empresas, pero también de Puebla y el País, ahí estuve feliz, yo diría que hasta ahora ha sido uno de los mejores trabajos de mi vida”.
Decidió salir de su zona de confort y estudió una maestría en Administración en la Escuela de Negocios San Pablo CEU en España; esta maestría tenía un componente humanista muy fuerte, ya que, cursó clases de historia, análisis político, así como doctrina social de la iglesia.
“Fue muy interesante darme cuenta de cómo la técnica dura de gestión compaginaba con esta otra forma de buscar poner a la persona en el centro; eso y mi experiencia en COPARMEX, me dejaron marcado, porque después estudié una maestría en Doctrina Social, me di cuenta de que es un secreto muy bien guardado porque no mucha gente lo conoce, pero cuando lo vuelves operativo para tratar de construir una sociedad más justa hay muchísimo de donde echar mano”.
Previo a comenzar su experiencia como emprendedor, trabajó para Grupo ADO, en un inicio en un puesto de gestión gerencial en la recién implementada área de planeación estratégica, dos años posteriores ya se encontraba a cargo de dicha área.
“Hoy ADO es una empresa que tiene subsidiarias en España y en Latinoamérica, fue parte del esfuerzo que hicimos en ese momento, Cielito querido Café es una empresa que diseñamos y echamos a andar a partir del área de planeación estratégica y fue una experiencia enriquecedora. Decidí renunciar para independizarme, para poner mi propio negocio”.
Pellico Villar decide iniciar su negocio de consultoría, ya que, se dio cuenta que había una gran carencia en las empresas, que era administrar la gestión para poner a la persona en el centro de una manera sistemática.
“Estaba muy de moda la Responsabilidad Social Empresarial, pero me daba cuenta que muchas veces eran poses de las empresas para lavarse la cara, o eran intensiones mercadológicas para vender más, pero también me di cuenta que había empresas que genuinamente querían poner a la persona en el centro, sin importar el rol que juegue en la empresa”.
Mientras estaba en ADO estudió un seminario en la Universidad de Harvard en Balance scorecard que es la metodología por la cual realizaba la implementación de la gestión estratégica en ADO.
Una vez aprendido eso y después de haber cursado la maestría en Doctrina Social en el IMDOSOC y la Universidad de Salamanca en su campus Madrid se dio cuenta de cómo existía un vínculo entre la gestión estratégica basada en el Balance scorecard y la gestión estratégica a partir de las relaciones de causualidad que aporta la doctrina social, fue entonces que diseñó un modelo en donde se juntan ambos para dar paso a lo que denominó el Modelo de Gestión Centrado en la Persona.
“En Solidarium, la empresa que fundé nos dedicamos a dar formación y consultoría a empresas que buscan poner a la persona en el centro, que lo quieren hacer genuinamente y que no encuentran cómo y que a partir de este modelo les ayudamos a aterrizar una gestión estratégica centrada en la persona”.
Recalcó que la UPAEP es una de las mejores universidades del mundo porque entiende que la plena realización del ser humano no es solamente saber una buena técnica, sino que hay que tener un sentido, un propósito y eso no te lo da la técnica, te lo da el levantar la mirada y entender la vida con un sentido trascendente.
“La UPAEP es una institución que forma a sus alumnos para que se cuestionen, para que descubran un sentido de vida trascendente y para que ese sentido tenga que ver con el servicio y la donación a los demás”.
Entrevistas
Ser UPAEP es buscar que el bien común sea lo más importante sin importar tu actividad profesional
11 marzo Por: Fernanda Bretón