[Fue divertido y riesgoso filmar esta película: realizadores.]
A más de veinte años de haber sido estrenada, Salón México, dirigida por José Luis García Agraz, es una película que sigue gustando en el público, aseveró Luis Urquiza, Gerente de Producción de dicho filme.
La película fue divertida y riesgosa hacerla, comentó José Luis García Agraz, “como nos metimos con una película que había hecho el Indio Fernández en un país donde de pronto todos son totems, en donde todo está lleno de almidón fue duro también; yo digo que nos criticaron mucho, pero luego la película se impuso en la gente y a los años, es una película muy bonita y que a la gente le gusta ver, la música es hermosa, tiene buenas cosas”.
Por su parte, para Urquiza, en ese momento, Salón México representaba la película más grande e importante de su carrera. Mencionó que su participación en esta película se dio gracias a la invitación de Tlacateotl Mata, “parte de mi responsabilidad fue la de cerrar toda una calle, que era la calle de Brasil pintarla y hacerla de la época, adaptarla a un México con todo lo que significaba el movimiento, para mí fue emocionante”.
El cómo se da la idea de llevar de nueva cuenta Salón México al cine inicia en el momento en que María Rojo compra los derechos de la historia, relata García Agraz.
“Yo no estaba en la lista para ser el director de esa película, de hecho a mí, cuando me dijeron comenté; para qué la quieren hacer si ya la hicieron, coincidió que quien le hizo caso para hacer la película fue Nacho Sada y él quiso que yo fuera el director”.
Agregó que para el proceso de adaptación le pidió a Rafael Ramírez Heredia escribiera un cuento que contuviera los elementos básicos de la la historia original de Mauricio Magdaleno. Ya con el cuento le solicitó a Lichi Diego, redactara el guión que es lo que se ve reflejado en el filme.
“La película tiene anécdotas interesantes, porque la música la hicimos con puros Cubanos; José María Vitier, vino a México para hacer las danzoneras con influencia cubana”, detalló José Luis García Agraz.
Recordó que Vitier decidió hacer un tour musical por México, recorrieron durante una semana diferentes centros nocturnos y su conclusión fue: “en México tienen muy malos baileros, son muy malos los tambores, pero eso sí tienen unos alientos que son para el cielo, tienen los mejores alientos que yo he escuchado en mi vida”, fue así que empezó a determinar cómo iba a ser la música.
“Fue muy interesante esta parte cubana, se contrató también al coreógrafo Gustavo Herrera, quien había huido y decidió quedarse en México, incluso él busco a los bailarines”, explicó García Agraz.
Luis Urquiza, mencionó que resultó una sorpresa para él haber sido invitados al 7mo Encuentro Académico de Cine organizado por la UPAEP.
“Para mí fue una sorpresa la invitación al igual que un halago. El trasmitirle a los jóvenes que se puede hacer ese tipo de cine, bien cuidado, que trasciende y que no pasa, creo que es una maravilla”.
Reconoció que Salón México fue una gran escuela para todos los que participaron en ella, “fue gracias también a esa gran oportunidad que se aventó Televicine de atreverse a hacer este tipo de películas arriesgadas en su momento en donde la taquilla no era tan importante”.
José Luis García Agraz, reconoció que en su momento no representó mucho el que la película lograra alcanzar ochocientos mil espectadores, sin embargo, a los años reconoció, que en ese momento esa película estaba siendo vista por lo máximo de gente que se podía en ese momento, “era importante que la gente la viera”.
Finalmente, el director de Salón México exhortó a los jóvenes estudiantes a que quien quiera hace cine, lo haga, que no oiga a nadie más, que escuche la voz interior, “existen varios elementos, puede tener cero talento, pero si la vocación lo empuja a hacer cine que lo haga hasta que llore y le avienten piedras sus vecinos, que no se detenga”.
Por su parte Luis Urquiza, mencionó que hoy en día se tiene acceso a herramientas para poder desarrollar cine, “no hay pretextos, tienes pasión pónsela, trabaja, haz el mejor encuadre, ponte a escribir, haz lo que quieres hacer”.
