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Durante esta pandemia se ha hecho indispensable el uso de algunos aparatos médicos para medir aquellos parámetros físicos que nos indican como nos encontramos de salud. Por ejemplo, la medición de la temperatura por medio del termómetro infrarrojo se habló en una edición pasada. Ahora hablaremos del índice de saturación de oxígeno en la sangre, y por qué también es importante tener en casa un oxímetro de pulso.

El oxímetro es un aparato no invasivo que muestra el porcentaje de sangre portadora de oxígeno identificando las características de absorción de luz de la hemoglobina y la oxihemoglobina (proteína de sangre que transporta el oxígeno gracias al fierro que lleva en su centro). La oxihemoglobina absorbe más luz roja y permite pasar la luz infrarroja de longitud de onda de 940nm. La hemoglobina sin oxígeno absorbe luz roja y permite el paso de la luz infrarroja 940nm. Es decir, hay diferencia de color entre ambas proteínas; la oxihemoglobina es de color rojo brillante, mientras que la hemoglobina sin oxígeno es más oscura.

El dispositivo tiene forma de pinza, como un dedal, y se coloca en el extremo de un dedo para medir saturación de oxígeno (SaO2). Un lado tiene una fuente de luz (diodos LED) de dos tipos, roja de 660nm e infrarroja de 940nm, que se transmiten a través del dedo hacia el lado detector de luz (fotodiodo). Es decir, contiene una fuente de luz, un detector de luz, y un microprocesador que compara, filtra la señal pulsante y calcula las diferencias en la hemoglobina pobre en oxígeno y rica en oxígeno. El microprocesador calcula las diferencias entre la luz emitida y la luz transmitida, y convierte la información en una lectura digital.

La mayoría de los oxímetros marca un 2% por encima o por debajo del nivel de saturación obtenido mediante una gasometría arterial; esto significa que, si su nivel de saturación de oxígeno medido con un oxímetro de pulso es 92%, en realidad puede estar entre el 90 o 94%. La lectura del oxímetro puede ser menos exacta si la persona tiene las uñas pintadas, uñas artificiales, manos frías o mala circulación. La mejor lectura se obtiene cuando la mano está tibia y posicionada por debajo de la altura del corazón. Si se fuma, el oxímetro puede indicar un nivel de oxígeno más alto que el real pues fumar aumenta los niveles de monóxido de carbono en la sangre, y el oxímetro no distingue entre monóxido de carbono y oxígeno. El oxímetro también indica el pulso (frecuencia cardiaca). Una manera de asegurar un buen estado de salud es medir las pulsaciones por un minuto y compararlas con la lectura del oxímetro. En esta contingencia, el oxímetro ha permitido la pronta intervención de los médicos antes de que un enfermo por COVID entre en etapa crítica por falta de oxigenación.