En sus múltiples intentos por ganar la elección o reelección presidencial, Donald Trump siempre se limitó a levantar calumnias contra sus opositores – como en 2012 decía: Barack Obama no tiene ciudadanía estadounidense, en 2015: México nos envía criminales, violadores y narcotraficantes. En 2019: El hijo de Joe Biden debe ser investigado por crímenes en Ucrania (esta irracionalidad resultó en el juicio político contra Trump). Pero ahora la situación es diferente y extremadamente peligrosa: bajo el impacto de sus pésimos resultados en las encuestas nacionales, Trump aparentemente está tratando de dividir a los estadounidenses con amenazas de violencia a tal grado de provocar convulsiones de extrema violencia interna.
El 31 de agosto de 2020, en la ciudad de Pittsburgh, el candidato del partido demócrata para la presidencia de los Estados Unidos, Joe Biden, lanzó un ataque verbal, inédito por su brutalidad en la historia de campañas electorales en E.U.A., contra el presidente Donald Trump. Biden dijo:
Biden hizo mención a unas palabras del venerado presidente Franklin Delano Roosevelt durante la Segunda Guerra Mundial (1939 – 1945), cuando dijo que “las noticias van a ir peor, antes de que vayan mejor”. Y subrayó que el pueblo estadounidense se merece que se le hable lo más directo posible: “El trabajo del presidente es ser directo, decir la verdad y ser fiel a los hechos para liderar, no para incitar. Por ese motivo les hablo hoy – afirmó Biden – el presidente actual es incapaz de decirnos la verdad (en sus 1 250 días en la Casa Blanca, Trump ha emitido 21 000 mentiras), incapaz de hacer frente a los hechos e incapaz de sanar. No quiere arrojar luz, quiere generar conflicto y está alentando la violencia en las ciudades de nuestro país”.
Biden exigió, además, que acaben los violentos altercados raciales en muchas partes del país. “Voy a ser muy claro sobre todo esto, los disturbios aplaudidos por Trump no son protestas. Los saqueos no son protestas. Desencadenar fuegos no son protestas. Nada de esto es protestar. Es ilegal, simple y llanamente. Y aquellos que lo hacen deberían ser juzgados. La violencia no traerá cambio, solo traerá destrucción. Está mal en todas sus maneras, divide en lugar de unir”.
Biden apuntó que el país está haciendo frente a múltiples crisis y bajo el mandato de Trump se han multiplicado: Covid-19, devastación económica, brutalidad y violencia racista policial, el uso injustificado de tropas federales contra demostraciones pacíficas, nacionalistas blancos envalentonados y con el visto bueno de Trump, ajustes de cuentas sobre la raza, una fe en declive hacia un mejor futuro estadounidense. En su discurso, Biden consideró que el hilo común es Trump, al que describió como “un presidente en ejercicio que empeora las cosas, no las mejora.
Un presidente en ejercicio que siembra el caos en vez de proporcionar orden, un presidente en ejercicio que fracasa en el deber básico de su trabajo, que es decir la verdad que todos sabemos que es que todos tenemos derecho a vivir en libertad y buscar la felicidad”.
El demócrata dio este discurso después del asesinato del afroamericano George Floyd, ahorcado a manos de cuatro policías en Minneapolis y después de que, el 23 de agosto, otro hombre afroamericano resultó paralizado por siete disparos en su espalda a quemarropa por un policía blanco en Kenosha, Wisconsin. En medio de protestas el mismo día, un seguidor de Trump asesinó a dos inocentes participantes en la marcha. Pocos días después un hombre murió por un disparo en el pecho en Portland, Oregon, después de que el sábado pasado por la noche, se registraron choques entre los seguidores de Trump y miembros del movimiento “Black Lives Matter”. Las protestas en Portland ya han continuado durante más de 100 días.
El asesino de Kenosha fue defendido por Trump de actuar en legítima autodefensa, el policía que disparó 7 veces en la espalda del joven afroamericano – según Trump – probablemente sufre de algún tipo de confusión. En el contexto de las constantes protestas en Portland, Trump culpó el lunes de esta semana al presidente municipal de Portland, Ted Wheeler, de la situación en esa ciudad en uno de sus Tweets: “Portland es un desastre, y lo ha sido por muchos años. Si esta broma del alcalde no la limpia, (la ciudad) ¡entraremos y lo haremos por ellos”.
En otro mensaje en Twitter, Trump arremetió contra los alcaldes y gobernadores “de la izquierda radical”: “Los gobernadores y alcaldes de la izquierda fuera de control en ciudades alrededor de nuestro país donde esta loca violencia está pasando, han perdido el control de su movimiento en mi contra. Se supone que no iba a ser así, pero los anarquistas y los agitadores se dejaron llevar y no escuchan más – incluso han forzado a Joe Biden a salir de su sótano en Delaware. El irracional presidente acabó con un último tuit en el que dijo solo tres palabras: “LEY Y ORDEN!!”
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Dr. Juan Carlos Botello Dr. Werner G.C. Voigt |
