Por: Luz Corona, alumna de 3er semestre de bachillerato.
Empecé a bailar danza folclórica a los 9 años de edad. Nunca imaginé el gran impacto que iba a tener en mi vida. La primera vez que vi un video de The Royal Edinburgh Military Tattoo tenía 12 años, quedé asombrada y me emocioné mucho. Nunca imaginé que cuatro años después de ver aquel video estaría pisando ese escenario, en uno de los eventos más importantes de bandas militares del mundo que se realiza cada cuatro años.
Mi sueño comenzó cuando en julio del año pasado nos invitaron a la gira y dos eventos que se realizarían: Basel Tattoo y The Royal Edinburgh Military Tattoo. Me sentí muy ilusionada. Por supuesto, no hubiera llegado tan lejos sin el apoyo de mis padres. Lo que me dijeron cuando les mencioné el proyecto fue: “¿Quieres ir?, cuenta con nosotros”.
Desde el primer ensayo, no me imaginaba exactamente el tamaño que tendrían las arenas pero sabía que sería algo importante. Después de todo el esfuerzo, ensayos y sacrificar muchas cosas, el momento llegó. Despegamos de México hacia Europa con muchas ganas de demostrar nuestro talento y representar dignamente a nuestro país.
El primer ensayo en la arena fue emocionante. La banda que representó a México en el Basel Tatto 2018 fue la Banda Monumental de México, conformada por la Compañía de Danza Folklórica Tenochtitlan, Instituto la Paz de Puebla, Mariachi Oro de México y Jaguares Marching Band. En la primera función sentía un escalofrío recorriendo mi cuerpo porque no sabía qué iba a pasar. Sin embargo, cuando me puse el vestuario de azteca, sabía que sería una de las mejores experiencias de mi vida. Empezó la música, se abrieron las puertas y escuché los primeros aplausos. La banda de música empezó a tocar, todos los bailarines salimos a escena y pudimos atestiguar las sonrisas, la emoción y satisfacción que transmite el público con sus aplausos y silbidos. Al final del show supimos que el público había quedado satisfecho porque seguían aplaudiendo y dando golpes en las gradas.
También hubo un desfile de los participantes. Cuando nos tocó pasar escuchamos el grito de “¡Viva México!”, “¡amo México!”, “¡hermoso México!”. Salir en las noticias también fue una gran experiencia. Basel Tattoo 2018 me permitió conocer a gente increíble de otros países e hice amigos nuevos.
The Royal Edinburgh Military Tattoo
Este evento fue diferente y también estimulante pues el público fue más numeroso (más de 9 mil personas). La arena era más grande e imponía un poco más. Sin embargo, desde la primera función sentí una gran satisfacción y alegría. Quería seguir poniendo en alto el nombre de México en uno de los eventos militares con más prestigio en el mundo.
La ciudad de Edimburgo me gustó mucho, sobre todo cuando pude bailar frente a uno de sus imponentes castillos. El sueño que empezó a los 9 años lo estaba cumpliendo a mis 16. Recuerdo que se abrieron las puertas del castillo y pude mirar hacia arriba. Comprobé, una vez más, que las personas apreciaban nuestro trabajo. Muy cerca pude distinguir la bandera de México en lo alto de las gradas; fue una sensación asombrosa.
Una sorpresa adicional fue cuando transmitieron el evento por la BBC de Londres. Sus cámaras nos enfocaron mientras bailábamos. Al final del festival los organizadores mencionaron a La Banda Monumental de México como mejor grupo del Tattoo. El público nuevamente se puso de pie y supe, al fin, que representamos con pasión a México en el festival militar más importante del mundo.
Ahora tengo una perspectiva más valiosa de mi país. También sé que el trabajo comprometido y el esfuerzo te pueden llevar a vivir experiencias importantes para tu vida. Por supuesto, desde ahora la frase “soy mexicana” tiene un significado diferente para mí.
