Pastoral UPAEP organizó la tradicional Peregrinación a la Basílica de Guadalupe en formato virtual.
Por: Dafne Ixchel Agüero
En el marco de la 41 Peregrinación a la Basílica de Guadalupe, Pastoral UPAEP organizó la edición virtual del evento con el propósito de preservar la tradición y la espiritualidad tanto de la comunidad universitaria, como del público en general.
A lo largo de la semana, se presentaron diversas actividades de interacción a través de una plataforma creada especialmente para dicho evento. Entre ellas se contó con una conferencia del Mtro. David Sánchez Sánchez, director académico de los Programas de Humanidades de la universidad.
En su charla, el Mtro. David explicó una serie de momentos significativos en la historia de México que demuestran que la Virgen de Guadalupe tiene vinculación con el aire, el mar y la tierra.
Para explicar la relación que existe entre la Virgen y el concepto del aire, el ponente proyectó una serie de pinturas en las que se pudo observar al ayate guadalupano ser trasladado a su santuario desde una vista aérea, así como la primera fotografía panorámica de la Ciudad de México en la que se muestra el Cerro del Tepeyac.
Asimismo, el Mtro. David dijo que existe una relación con el escuadrón 201 de la Fuerza Aérea Mexicana, debido a que la mamá de uno de los soldados envió un banderín con la imagen de la Virgen que fue firmado por los integrantes.
Finalmente, compartió la anécdota del astronauta mexicano José Hernández Moreno, quien llevó al espacio las medallas de sus hijos como objeto personal en el 2009 y posteriormente, en el 2016, el globo sonda que la UPAEP envió al espacio curiosamente aterrizó a los pies de una pequeña capilla dedicada a la Virgen en una casa particular.
En cuanto al vínculo con el agua, el primer acontecimiento que se presentó fue el de 1531, cuando se trasladó el ayate a la primera ermita guadalupana a través de la calzada del Tepeyac, que en aquella época estaba rodeada por agua.
De la misma manera, explicó cómo fue que varios náufragos que llegaron a Nueva España ofrecieron a la Virgen el mástil de su navío como agradecimiento por haberlos salvado, así como el caso de un hombre endemoniado que, al viajar a México a través del mar, quedó curado por la protección su Madre.
El primer momento significativo que hace relación a la tierra, es que la misma Virgen María pisó la tierra de Galilea, con un calzado de tejidos naturales que se puede observar en el Ayate Guadalupano.
En 1754, explicó David, con las palabras del Papa Benedicto XIV “No ha hecho nada semejante con ninguna otra nación” se conoce a la Virgen como Patrona de esta Tierra que hoy es México.
La advocación guadalupana, argumentó, se defiende al llevar su imagen en el estandarte y blasón de Miguel Hidalgo en la lucha de independencia y al recordar este acontecimiento en su centenario.
Para finalizar su participación en el evento, David Sánchez Sánchez compartió un texto de Altamirano en el que dijo que las diferencias entre pobres y ricos, mestizos e indios, conservadores y liberales desaparecen ante los altares de la Virgen de Guadalupe.
La virgen de Guadalupe nos ha acompañado por el aire, el mar y la tierra a lo largo de la historia y de los momentos cruciales de la actual tierra mexicana, dijo David, hoy 2020 nos consagramos a la Virgen para darnos fuerzas y ánimo para superar esta pandemia mundial, finalizó.