La actividad no ha parado en el CITAP ni la Posta Zootécnica durante la cuarentena, donde nacieron 36 borregos y los campos se llenaron de jitomate, chile poblano y pepino.
Por ser espacios en los que se trabaja con especies de animales y vegetales, el Centro de Innovación Tecnológica en Agricultura Protegida y la Posta Zootécnica UPAEP se mantuvieron en actividad durante la cuarentena.
Resultado de estos cuidados, nacieron 36 ovejas, en tanto que los campos e invernaderos se llenaron de jitomate, tomate, chile poblano y pepino, especies animales y vegetales que se producen en los espacios diseñados principalmente para que estudiantes de Medicina Veterinaria y Zootecnia e Ingeniería en Agricultura pongan en práctica sus conocimientos teóricos.
Y es que en estos lugares los estudiantes de Ingeniería en Agronomía aprenden a sembrar, a trasplantar, preparar los sustratos, a regar, a fertilizar, a controlar e identificar enfermedades o plagas y a cosechar; en tanto los de Medicina Veterinaria y Zootecnia conocen sobre prácticas de reproducción, aprenden a realizar ultrasonidos a las distintas especies, a desparasitar, a canalizarlos, aplicar sueros, vitaminarlos, etcétera.
La Posta Zootécnica cuenta con 8 caballos, 10 novillos, 89 borregos más las 36 crías que recién nacieron, 5 sementales, 3 becerras, 10 toros de engorda, 8 vacas y 100 aves de postura (gallos y gallinas) y los estudiantes
Por lo anterior, el Mtro. José Juan Zamorano Mendoza, Jefe administrativo de la Posta Zootécnica y el CITAP, ubicados en el municipio de Atlixco, indicó que “la actividad no se puede interrumpir pues a los animales hay que alimentarlos y darles el cuidado necesario y en el caso de las plantas hay que regarlas, fertilizarlas para que sigan creciendo y produciendo, es decir, independientemente de la pandemia se trabaja los 365 días del año”.
Lo anterior, aclaró, porque hay especies que requieren mucha atención, como por ejemplo los caballos que dijo son propensos a enfermarse y morir incluso por un cólico no atendido.
“Estas especies deben comer mucha fibra y tomar mucha agua, darles rienda, es decir, ponerlos a correr pues es una de sus condiciones naturales y ayuda a evitarles cólicos, etcétera. Así con cada especie, tiene sus cuidados especiales y no podemos abandonarlos por un largo tiempo”, detalló.
Respecto a la producción, el Mtro. José Juan Zamorano aclaró que si bien la producción se vende y sí se busca la sustentabilidad financiera, no se trata de una empresa que se dedique a la producción o crianza, por lo que la principal enseñanza a los estudiantes es que busquen una producción más eficiente.
En el caso de la cosecha del CITAP, indicó, se vende a hoteles y restaurantes, en tanto la de la Posta Zootécnica, como no es tan grande, se distribuye en pequeños comercios.
Agregó que aunque el personal de estos espacios continuó laborando tuvieron que implementar algunos cambios debido a la pandemia, desde las medidas básicas de higiene de lavarse las manos constantemente y el uso de cubre bocas hasta dividirse el trabajo por áreas para respetar la sana distancia.
Incluso, informó, que para el regreso a la nueva normalidad existe ya un protocolo de bioseguridad que cuando los estudiantes se reincorporen tendrán que seguir, desde el transporte, dividir los grupos, vestimenta, uso de regaderas, etcétera.
“En el caso de la Posta Zootécnica por lo general hay dos grupos completos diariamente, y en el caso de los invernaderos van todos los viernes, por lo que se tendrá que respetar la sana distancia y dividir los grupos e instalar cámaras para que aquellos que se quedan en casa puedan seguir el día de práctica vía remota”, finalizó.
