A lo largo y ancho del país trabajadores de la salud hacen frente a la pandemia por la COVID-19 en condiciones precarias pero con la misión de ayudar a los pacientes, lo único que piden de la sociedad es conciencia.
“En Tuxtepec estamos viviendo una de las semanas más críticas, desgraciadamente la gente no cree, no sigue indicaciones para prevenir la enfermedad, siguen en las calles. Los casos han ido en aumento y creen que nosotros, como personal de la salud, somos quienes les estamos matando”, manifestó la estudiante de UPAEP Abierta, Anabel Arano Cruz,quien trabaja en el Hospital General de Tuxtepec, Oaxaca.
A este respecto, su compañero de vida y de profesión Adrián Avendaño Martínez, detalló que tan solo en Tuxtepec suman poco más de mil casos confirmados y 101 defunciones lo que les coloca a nivel de países europeos en donde la mortalidad alcanzó al 10% de la población infectada.
Y es que pese a la insistencia a través de medios de comunicación de seguir las indicaciones de la sana distancia así como del uso de cubrebocas y el lavado constante de manos, en Tuxtepec, como en muchos lugares de la República Mexicana la gente continúa en las calles.
A este respecto, la también estudiante de Enfermería Abierta de la UPAEP se dijo triste por la situación ya que la indicación por parte de su Hospital es vestir de civil al llegar y al salir del nosocomio para evitar contratiempos con gente que por “ignorancia” creen que ellos, como personal de salud, mata a los enfermos.
“Estudié 4 años para ser enfermera y sigo preparándome para ejercer mi profesión. No estudiamos para matar, son varios los años que nos quemamos las pestañas para obtener un título como para que nos digan que lo que hacemos es matar, para eso no se estudia. Estoy orgullosa de ser enfermera, no es justo que tengamos que ocultarnos por miedo”, expresó Anabel.
Aunque Anabel y Adrián, aclararon que no han sufrido agresiones de este tipo, se han enterado que personal de salud de comunidades cercanas han sido víctimas de secuestro por esta causa.
“Vivo para mis pacientes, soy feliz atendiéndolos, de ejercer mi profesión, pero triste a la vez por la situación que la misma gente genera”, confesó Anabel Arano.
En este mismo sentido, Claudia Alvarado González, también estudiante de UPAEP Abierta y que trabaja en el Hospital La Margarita en Puebla, indicó que quienes estudian Enfermería, eligieron la carrera justamente porque tienen esa empatía con los pacientes.
“Mi lema es que hay que tratar como quisiéramos que nos trataran a nosotros, no por el hecho de que fueron confirmados como enfermos COVID-19, quiere decir que hay que tratarlos diferente. Son personas como nosotros, y debemos atenderlos como si fueran nuestros familiares”, indicó.
En tanto, Adrián Avendaño quien dijo que también que aún se siente orgulloso de ser Enfermero, pidió la empatía de la sociedad con el personal de la salud, quien hace mayor esfuerzo aún en condiciones precarias y aguantando sus necesidades fisiológicas pues al entrar al área COVID, no pueden hacer otra cosa que no sea atender a los pacientes.
“Tratamos de dar lo mejor de nosotros dentro y fuera del hospital. Hacemos nuestro trabajo sin rencor, nos enseñan a cuidar de corazón, de buena fe, sin esperar que la sociedad me diga héroe, sin esperar que me den un bono por pandemia, sin esperar nada de eso, simplemente hago mi trabajo, porque me gusta. Deseo que nosotros como planeta como mundo, nos recuperemos de esta situación que nos esta matando”, agregó Adrián Avendaño.
Finalmente, advirtió, “la enfermedad (COVID-19) sí existe, lo he vivido, he visto morir gente por esta enfermedad al igual que he visto a gente recuperarse. La lección que nos deja esta situación es cuidar de nosotros mismos, cuidarnos como sociedad”.
“No somos héroes, somos trabajadores enfrentando una pandemia, necesitamos ayuda de la sociedad para que esto mejore”, finalizó Anabel Arano.
