Catedrático de la George Manson University aclara la controversia sobre el contagio entre mascotas y humanos. Es la especie humana quien puede contagiarlos y no viceversa, destaca.
“Nosotros (los humanos) fomentamos la transmisión si no tenemos el cuidado correspondiente de lavarnos las manos al momento de tratar con nuestras mascotas".
“Es una pena que las personas abandonen a sus animales por temor a contagiarse”, expresó Alonso Aguirre, profesor y director del Departamento de Ciencias Políticas Ambientales y del comité de Uso y Cuidado Animal de la Universidad George Mason de los Estados Unidos.
Lo anterior en una charla virtual con el área académica de la Facultad en Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UPAEP, donde compartió su perspectiva respecto al origen y evolución que ha tenido la pandemia por la COVID-19 y la importancia de incluir a médicos veterinarios en el manejo de planes de emergencia.
De este último punto, señaló que el médico veterinario es la persona más entrenada para poder enfocar y proveer la experiencia en el manejo de muchas especies, pues se encarga del 99% de las existentes en el planeta.
Agregó que al tener el conocimiento de que es un virus que inició su transmisión en los mercados mojados de China, lugar en donde venden muchos animales del mar, especies domésticas y silvestres para el consumo humano, puede tratarse de una zoonosis, lo que hace indispensable el involucramiento de medicos veterinarios a este problema de salud pública.
Ante la pregunta ¿qué condiciones tuvieron que darse para saltar la barrera de la especie?, es decir, que pasara de ser un virus de animales a humanos, el también fundador de la disciplina en Medicina de la Conservación dijo que con seguridad es un virus que ha estado circulando por más tiempo en la civilización China antes de que se esparciera por el mundo.
Y es que señaló, normalmente para que un virus rompa esa barrera se lleva décadas, más de 50 o 100 años.
“Fue lo que vivimos con el virus del sida que proviene del este de África con los chimpancés y otros simios, pasaron muchos eventos y decadas para que pudiera multiplicarse y que finalmente se estableciera en las poblaciones humanas”, observó.
Explicó que la etapa de infección primero se da entre animales, la segunda cuando pasa a humanos, la tercera de humanos a humanos y la cuarta cuando se mantiene la infección en humanos a largo plazo.
“Lo que sabemos del COVID-19 es que vino de etapa 1 a 4, no sabemos qué paso en la 2 y la 3, fue un evento extremadamente rápido”, destacó.
“Estamos traficando legal e ilegalmente la vida silvestre y el movimiento llamado globalización genera las condiciones para que no sólo los humanos o animales por mar o tierra muevan los patógenos. Estamos dañando al medio ambiente para que estos microorganismos tengan las condiciones necesarias para su dispersión e infección”, explicó.
Advirtió que el grupo de coronavirus es muy diverso y puede afectar a muchos mamiferos, específicamente a felinos, o el caso del perro que salió positivo en China, por lo que se recomienda a la población tomar las precauciones necesarias con los animales para evitar contagiarlos.
Finalmente, reiteró su recomendación a los profesionales de la Medicina Veterinaria de involucrarse de manera táctica en la problemática de la zoonosis y participar en la toma de decisiones en esta pandemia ocasionada por la COVID-19.
Comunidad
Un error abandonar a las mascotas por miedo a contagiarse de COVID-19
23 abril Por: Yolanda Jaimes