[Un docente transmite conocimientos y valores al mismo tiempo.]
Como parte de las actividades del 1er. Congreso de Investigación Educativa, se llevó a cabo el panel "Reflexión, Innovación y Ética en la práctica docente”, el cual contó con la participación de la Dra. Bertha Fortoul Ollivier, Investigadora y profesora de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales de la Escuela Normal La Salle; la Dra. Gabriela Croda Borges, Directora del Doctorado en Educación y el Dr. Juan Martín López Calva, Decano de Posgrados en Artes y Humanidades de la UPAEP.
Para iniciar el panel, la Dra. Bertha Fortoul destacó que la docencia es la relación con el humano, es decir, qué tanta disponibilidad tienen los profesores para interactuar con los estudiantes. “La manera de darle sentido a la docencia y cómo compartirla es la manera en que el docente actúa en el aula. Necesitamos saber qué se quiere transmitir a los alumnos y lo más importante, generar atención a los alumnos”, expresó.
Así mismo dijo que una de las cuentas pendientes por parte de los profesores en este proceso educativo es la evaluación, asunto que se debería atender técnica y pedagógicamente pero desde una perspectiva ética. “Siempre se tiene que tener claro para qué evaluamos, qué evaluamos y cómo evaluamos”, enunció la investigadora.
Por su parte, la Dra. Croda quién hizo referencia a la innovación en la educación, observó que los cambios en los procesos educativos generalmente se inician desde marcos territoriales en dónde no se toma en cuenta a los profesores, donde éstos adquieren una gran cantidad de responsabilidades debido a la burocratización de su quehacer, hecho que reduce su función dentro del proceso de enseñanza.
Agregó que estos modelos de cambio deben de generarse al interior de las aulas y las escuelas a partir de alternativas propias a fin de irlas adecuando según se requiera.
Para ello dijo, se deben presentar las nuevas propuestas sin restar importancia a lo que ya se hizo y estar conscientes de que los resultados no son inmediatos, se necesita persistencia. En este sentido, refirió, antes de cualquier cambio e innovación habría que preguntarse qué vamos evaluar, para qué lo vamos a evaluar y cómo lo vamos a innovar.
“Clarificar el objeto de la innovación tendría que ser el eje rector de cualquier iniciativa de cambio que busque transformar y mejorar el aprendizaje de estudiantes y la práctica docente”, indicó.
En tanto, el Dr. Martín López Calva, explicó la parte de la ética en la educación y para ello partió con la siguiente frase de Edgar Morán, "La ética surge de la experiencia profunda del ser humano, por que el ser humano no es un ser que vive para sobrevivir, sino que es un ser que aspira a vivir para vivir".
Mencionó que el vivir para vivir cuenta con dos dimensiones que son la parte prosaica y la poética; la primera dijo, tiene que ver con la supervivencia, es decir, con todo lo que tenemos que hacer en este mundo para garantizar nuestra supervivencia, y la segunda que se refiere a cómo nos realizamos a través de esas actividades, cómo encontramos esos destellos de belleza, disfrutar el conocimiento.
En este sentido dijo, se debe analizar qué tanto la escuela nos está ayudando a vivir la parte poética de nuestras vidas y asumir la parte prosaica, o qué tanto las universidades están volcadas en lo prosaico, es decir formando gente para sobrevivir en el mercado laboral, a la competencia, etc. Y qué tanto los profesores están ayudando a que los estudiantes vivan la parte poética de sus vidas.
Expresó que no se puede ver al docente únicamente en su función de enseñante de contenidos pues éste trabaja con personas, es decir, no solo puede limitarse a enseñar matemáticas porque al mismo tiempo transmite valores, lo que se traduce en un desafío ético.
Comentó que la ética profesional tiene que ver con 4 grandes principios: el de la beneficencia, hacer bien la profesión, justicia y la autonomía.
Finalmente dijo, "un profesor ético no es sólo el que trata bien a su alumno y trata de hacerle un bien, sino el que hace bien su trabajo docente, es decir enseñar bien su materia, disfrutarla y transmitirla de una manera en la que los alumnos aprendan siempre en el entendido de que el estudiante es un sujeto activo, que piensa, decide y puede dar su opinión en un ambiente de justicia social”.
En el acto inaugural, el Dr. Emilio José Baños Ardavín, invitó a los asistentes a no solo proteger “muros adentro”, sino responder a la demanda social, a construir con las nuevas generaciones el tejido social y a ser efectivos transformadores de la sociedad.