Por: Juan Carlos López Mena Gómez
Los edificios de la UPAEP son monitoreados constantemente por el Decanato de Ingenierías, sobresaliendo como la única Universidad con un sistema de alerta sísmica con tecnología de punta que puede alertar hasta con 90 segundos previos al evento, afirmó el Dr. Hugo Ferrer Toledo, Decano de Ingenierias de la UPAEP.
Los desastres naturales, dependiendo de su intensidad, pueden provocar grandes daños a las estructuras de los edificios, dichos afectaciones, son clasificadas por el Banco Mundial, y el INEGI dependiendo su ubicación, impacto y vulnerabilidad de las edificaciones.
Asímismo, observó que los tres fenómenos que más impactan a México son: las inundaciones, las lluvias torrenciales y los sismos. “México es un país costero, por dos de sus lados tiene costa, además en dos zonas importantes tenemos una generación de sismos importantes, por lo que el nivel o daños que podemos llegar a tener es muy alto, incluso, más que en otros países” afirmó el Dr. Hugo Ferrer.
La manara en que dichos fenómenos naturales pueden afectar las construcciones depende de la fuerza y/o magnitud de los eventos y afecta de diferente manera. En cuanto a la infraestructura de los edificios, “los daños se previenen a través de las leyes de la física así como de modelos matemáticos que nos ayudan a saber como se comportarán las estructuras ante algunos fenómenos naturales que si bien no sabemos cuando van a pasar, sí sabemos cómo se comportarán. Esa es una de las formas en que se puede preveer por medio de dichos modelos”, comentó el Doctor.
De igual manera, el Decano nos compartió que “los modelos así como estudios, son controlados por los reglamentos de construcción, dichos lineamientos indican cuáles son los niveles de comportamiento que deben de cumplir los edificios ante ciertos eventos, que en ingeniería civil se llama solicitaciones”.
Una forma de prevenir en el caso de infraestructuras es analizar que no afecte a las personas. Por lo anterior, todo depende del uso que se le dará. “Las edificaciones que se hacen muy caras se protegen a sí mismas para que no se dañen” comentó el Dr. Ferrer. La intención es cuidar a las personas, por lo que dependiendo del uso que se le dé, se analizará la estructura, ya que como comentó el catedrático, no es el mismo uso que se le dará a un hospital donde hay gente con movilidad reducida, a una bodega donde sólo se almacenarán cosas y no habrá personas como tal.
Agregó que en ingeniería se diseña con dos vertientes, una que se llama el estado límite de falla y el otro que se llama el estado límite de servicio.
“El estado límite de falla se refiere a llevar al límite a la estructura; en el caso de un edificio cuando tiembla y se cae, es porque fue llevado a su estado límite de falla. Mientras que lìmite de servicio tiene que ver con su funcionalidad”, refirió el Dr. Ferrer.
