[El objetivo es mostrar las enseñanzas que el sismo de 1999 dejó al gremio de ingenieros y arquitectos.]
A 20 años del sismo de 1999, se llevó a cabo el 3er Coloquio de Ingeniería Sísmica UPAEP 2019, en donde se discutió desde diferentes perspectivas este evento que sacudió al Estado de Puebla.
El Mtro. Pedro Luis Díaz Bermúdez, Director Académico de Ingeniería Civil de la UPAEP destacó que una de las líneas de fortaleza en el campo de investigación de Ingeniería Civil es la ingeniería estructural y la sísmica.
“En esta ocasión surge la idea de hacer este coloquio para conmemorar este suceso, donde se dará a conocer lo que se está trabajando en la facultad a nivel de investigación.”
El Dr. Eduardo Ismael Hernández, profesor de la Licenciatura en Ingeniería Civil mencionó que el coloquio está enmarcado en un programa de divulgación en cuanto a la temática de riesgo sísmico.
Enfatizó que México es un país altamente sísmico y cada evento da nuevas lecciones al gremio de los ingenieros y arquitectos.
“El primer coloquio surge con el objetivo de mostrar a la sociedad las investigaciones que la UPAEP había llevado a cabo en cuanto a riesgo sísmico”.
Por su parte el Dr. Hugo Ferrer Toledo, Decano de Ingenierías de la UPAEP comentó que para las ciudades en el tema de ingeniería sísmica es de suma importancia la memoria escrita sobre los eventos que han ocurrido.
“La ingeniería sísmica pasa de determinar fuerzas sísmicas, de hacer corridas de dinámica estructural a temas de dinámicas de suelo, cómo se mueve la estructura y el suelo; cada vez se hace más complejo, por ello es muy importante que en este tipo de eventos se conjunten la experiencia y las ganas de transferir conocimiento con los jóvenes ávidos de aprender.”
Durante la conferencia inaugural titulada “Algunos daños en Puebla ocasionados por el sismo del 15 de junio de 1999. Caso historia del Colapso del Conjunto habitacional Los Sapos”, el Dr. Oscar Andrés Cuanalo Campos, Profesor Investigador de la Escuela de Ingeniería Civil de la UPAEP realizó un comparativo entre el macrosismo de Ciudad Serdán en 1973 y el de Tehuacán en el 99.
Especificó que dos de cuatro edificios de este conjunto habitacional se destruyeron y se tuvieron daños en las plantas bajas de los edificios restantes.
Agregó que según reportes del CENAPRED se dice que pudo haber sido una falla de cimentación y que ésta se penetró dentro del terreno; “lo que atribuyo es que no fue una falla de cimentación sino una falla de tipo estructural.”
Campus
UPAEP llevó a cabo el 3er Coloquio de Ingeniería Sísmica
19 junio Por: Fernanda Bretón