Con el regreso a la nueva normalidad en puerta, es importante recordar las sustancias que nos pueden ayudar a desinfectar espacios y objetos con los que se tiene mayor contacto.
El mantener una constante desinfección de nuestras manos y espacios con los que tenemos contacto ha sido una recomendación que se ha dado de cara a la lucha contra el COVID-19, sin embargo, con la reapertura de algunos lugares, es importante recordar cómo debemos usarlas y sobre todo no bajar la guardia y de esta manera evitar un rebrote, destacó Fernando Pérez Agüeros, Director Académico de Ingeniería Química Industrial de la UPAEP.
Recordó que para que las sustancias desinfectantes tengan el resultado deseado es importante no mezclarlas, ya que podrían perder su efecto sanitizante o de lo contrario podrían ser tóxicos. Además, recomendó el utilizar diferentes tipos de desinfectantes logrando así una rotación.
“La potencia de desinfección depende de la limpieza previa del material, esto se refiere a eliminar todos los residuos orgánicos que haya en éste que queremos sanitizar, esa es una condición, no podemos desinfectarlo si aún contiene residuos orgánicos como comida, o fibras”, agregó el profesor.
Uno de los agentes más utilizados son los halógenos, ejemplo de este es el cloro o químicamente conocido como hipoclorito de sodio, éste se ocupa en varios rubros como industrias alimenticias, granjas, restaurantes y sobre todo en materiales limpios. La manera de prepararlo es en un litro de agua, disolver cuatro cucharaditas de blanqueador, de tal manera que se ocupe esa cantidad, ya que su efecto dura un día. Hay que dejarlo actuar 5 minutos para que su acción desinfectante sea idónea.
Otros agentes químicos son los oxidantes. Aquí hay productos como el peróxido de hidrógeno en solución al 1-3% junto con ácido peracético al 0.08%, es algo tóxico y tiene un olor penetrante parecido al vinagre.
Mencionó que el uso del el ácido acético o vinagre, también es un aliado para poder desinfectar superficies, por lo que se recomienda sea disuelto en cantidades iguales en agua y para que su efecto sea efectivo hay que dejarlo actuar 20 minutos.
Destacó que otras sustancias desinfectantes son el formol al 0.1% y el óxido de etileno, pero estos son poco utilizados por la población en general.
Hasta el momento -dijo- el alcohol al 60-70% en agua o en gel, es el más utilizado durante esta pandemia, ya que éste desnaturaliza las proteínas del microorganismo.
Aunado a estas sustancias, el químico recomendó la sanitización de la garganta, método utilizado durante la pandemia de 1920; este proceso consiste en hacer gárgaras con bicarbonato de sodio, sal común o vinagre diluidos en agua y 3-5 minutos después de realizarlas, beber agua. “Es un enjuague para la garganta y un cambio en el pH que pueden inactivar el virus”.
De cara a la nueva normalidad, exhortó a la ciudadanía a cuidar la carga viral. “Nuestro sistema inmunológico crea nuestra propia vacuna, la cual depende del estado de salud. Si se observan las medidas de higiene como el aislamiento, evitar el contacto con grupos grandes de personas, lavarse manos, la desinfección de garganta y que todo lo que entre a nuestro hogar sea sanitizado, al momento de estar en contacto con el virus estaremos mejor protegidos”.