[Dura del 28 de octubre al 2 de noviembre.]
La fiesta más importante para los mexicanos y lo que viene siendo Mesoamérica, territorio que ocuparon las grandes civilizaciones del mundo prehispánico es la celebración del Día de Muertos, afirmó el Arqueólogo Eduardo Merlo Juárez, asesor cultural del Museo UPAEP.
Señaló que el mundo prehispánico comprendía el territorio de lo que ahora conocemos como Sinaloa, Zacatecas, San Luis Potosí, Sur de Tamaulipas y hasta Nicaragua, de donde nosotros heredamos una fiesta “importantísima, la Gran Fiesta de los Muertos”.
Indicó que la conquista europea de la que en estas fechas estamos cumpliendo los 500 años, intentó borrar todas las tradiciones pero, la celebración del Día de Muertos fue la que trató de eliminar con mayor fuerza porque iba en contra de la doctrina que ellos traían. “Los muertos cristianos se van según sus méritos al cielo, en donde están gozando la visión de Dios; al Purgatorio las almas que no acabaron por estar limpios para purgar lo que deben y luego salir al cielo, y los que se portaron mal, al infierno. Y en este caso, en ninguno de estos tres lugares, se sale”.
Mientras que, la tradición de los indígenas era más benevolente, más suave, “los muertos se van a descansar a un lugar que se llama Mitla o Mictlan –luagr de los muertos- en donde no sufren absolutamente nada, están descansando. Los privilegiados se van a los paraísos particulares que tiene el dios de la lluvia encima de las nubes o el sol en su recorrido, pero nadie sufre en el más allá”, expresó el Arqueólogo Eduardo Merlo.
Explicó que los mexicanos heredaron muchas cosas de aquel mundo, porque el mundo prehispánico duró más de 30 siglos y el mundo occidental en el que nos incluyeron, tiene apenas cinco siglos, por ello, la gran influencia de estas tradiciones, ya que muchos elementos del mundo antiguo los tenemos presentes en la actualidad.
Subrayó que la fiesta del Día de Muertos es una “fiesta de cosecha”, cuando comenzaba el periodo de las cosechas se tenía que recordar a los antepasados por varias razones, “porque de ellos se heredó el cultivar la tierra y después ellos, abonaron la tierra al ser enterrados y fructificaron y nosotros en realidad, comemos simbólicamente de ellos, que fueron nuestros antepasados y sirven de abono a la tierra, por ello, les celebramos y los recordamos cada año y por eso, hay que darles de comer”.
Dijo que la esencia de la fiesta del Día de Muertos es una comida extraordinaria para recibirlos, porque de acuerdo con las creencias prehispánicas, esos muertos si salen del lugar en donde están, para visitar a sus deudos vivos y son recibidos como visitas regias, es decir, “echa uno la casa por la ventana para agasajarlos con los platillos que les gustaban”.
Reiteró que el cristianismo no pudo borrar estas tradiciones pero las influyó, porque en la comida habitual que le llamamos ofrendas o altares de muertos incluimos elementos cristianos, como son el crucifijo, imágenes de la Virgen María, imágenes de algún santo o ángeles, etc., pero la esencia de la comida no ha cambiado.
Indicó que estamos cumpliendo 500 años de que intentaron borrarla y sigue más viva que nunca. Con el tiempo se ha enriquecido, en algún tiempo decayó en las ciudades, pero lo que es el campo, en las zonas rurales, jamás ha perdido presencia. “Los grupos indígenas son celosos de cumplir con esta tradición, siempre en los pueblos, en estas fechas encontraremos los altares de muertos”.
Con motivo de esas festividades, en la UPAEP se llevarán a cabo diferentes actividades relacionadas con el Día de Muertos, como es el Concurso de Altares 2019, a celebrarse este jueves 24 de octubre en el campus central a partir de las 16:00 horas; el 6º Festival de Todos los Santos en mi Barrio, el domingo 27 de octubre de 10:00 a 16:00 horas en las canchas de usos múltiples del parque del Barrio de Santiago; y, el 5º Concurso de Catrinas y Catrines Bailarines, que tiene como fecha límite de inscripción el lunes 28 de octubre de 2019, para mayores informes de este último evento, pueden consultar la página de internet, www.upaep.mx/bellasartes, además de que próximamente se llevará a cabo la Noche de Museos, y una exposición fotográfica alusiva a estas fechas.
El arqueólogo Merlo Juárez recordó que las fiestas de Día de Muertos se celebran del 28 de octubre al 2 de noviembre. Y a partir de que comenzaron a hacerse famosos los alebrijes, los muñecos gigantescos, las representaciones de la Catrina y Frida Kahlo como calavera, renació la tradición de Día de Muertos en las ciudades con una mayor fuerza.
