[Lleva 32 días cerrada la administración de Estados Unidos por presiones del mandatario norteamericano.]
En estos dos años de gestión de Donald Trump al frente del gobierno de los Estados Unidos, la relación con México ha sido negativa y está el riesgo de que nuestro país quede en el fuego cruzado que existe entre el partido republicano y el partido demócrata, afirmó el Dr. Derzu Daniel Ramírez Ortiz, profesor de la Licenciatura en Relaciones Internacionales de la UPAEP.
Explicó que en el tema de comercio podemos observar como el mandatario estadounidense logró establecer la idea falsa de que la relación comercial con México, le hace daño a los norteamericanos. Y a partir de ahí, Trump ha logrado replantear el esquema de libre comercio con México a través de la renegociación del tratado comercial.
De igual forma, dijo que el tema de la migración, ha sido utilizado muy demagógicamente por el gobierno de los Estados Unidos con la idea “de que los Estados Unidos tienen una frontera sur muy débil y que están expuestos a la entrada de migrantes indocumentados que son peligrosos para los ciudadanos norteamericanos”.
Apuntó que resultado de esa postura del presidente de los Estados Unidos ha provocado que México cargue con los costos del éxodo de la migración centroamericana.
Indicó que con respecto a los temas de seguridad y narcotráfico, también el gobierno de los Estados Unidos ha manipulado la información, “desde la perspectiva de Donald Trump, el problema del narcotráfico es un asunto en donde el cien por ciento es culpa de México. Nuestro país tiene la culpa porque los narcotraficantes mexicanos están inundando de drogas a los norteamericanos y no debemos olvidar que ellos están poniendo una gran cantidad de consumidores de drogas y está dejando de lado el combate a la distribución de éstas”.
Por lo tanto, el saldo para México de estos dos años del gobierno de Donald Trump es negativo tanto en términos comerciales, así como en el caso de los problemas de migración, seguridad y narcotráfico y la situación del muro, ha sido una herramienta demagógica de Donald Trump para presionar a sus opositores y generarles una mala imagen dentro de la opinión pública de los Estados Unidos.
El pasado 19 de enero, Donald Trump cumplió dos años al frente del gobierno de los Estados Unidos que en opinión del Dr. Derzu Ramírez, se distingue por cuatro características muy marcadas.
La primera es que el “modus operandi” de su administración se caracteriza por la confrontación y polarización, “Ha tenido muchas confrontaciones al interior de su gobierno y con el partido Demócrata. Hoy se cumplen 32 días de que el gobierno de los Estados Unidos esté cerrado, como una medida de presión que aplica el gobierno de Donald Trump para que el partido Demócrata le dé los más de 5 mil millones de dólares que necesita para construir el muro en la frontera con México. También sostiene confrontaciones con gobiernos extranjeros”.
Agregó que la segunda característica es que el presidente Trump ha utilizado la manipulación de la información como una de sus principales herramientas políticas, “de acuerdo a un estudio del periódico Washington Post, Donald Trump ha dicho más de 7 mil 600 falsedades, tergiversa la información para sus fines políticos, además de que con estas tergiversaciones ha logrado amasar su capital político, así como atacar a sus opositores políticos”.
El Dr. Ramírez Ortiz refirió que la tercera característica, que es un gobierno de mucha inestabilidad al interior del gabinete del presidente de los Estados Unidos, en donde al día de hoy, ha habido alrededor de 40 cambios de funcionarios de alto nivel en su gestión, debido a las tensiones que provoca el mandatario con su equipo de trabajo, además de las constantes fricciones que sostiene con sus opositores y gobiernos de otros países.
Y como cuarta característica, “es que ha sido una presidencia eficaz, pues ha logrado lo que ha prometido en campaña, gran parte de las promesas que hizo Donald Trump, las ha cumplido, y sólo le faltan dos, que son la construcción del muro y echar abajo el esquema de salud que su antecesor Barack Obama había establecido”.
