[1035 egresados de licenciatura, maestría y doctorado de UPAEP, reciben su grado académico.]
México no es un país de maleantes y corruptos, en México también se defiende la vida humana y la familia, especialmente a los más vulnerables y que existe una gran solidaridad, afirmó el Mtro. José Antonio Llergo Victoria, Secretario General de la UPAEP, al impartir la última Cátedra a los egresados de licenciatura, maestría y doctorado que recibieron su grado académico en la primera de dos ceremonias.
Dijo que este principio de solidaridad en los próximos años se debe promover y sostener en favor de aquellos que han sufrido la pérdida de seres queridos, pero también de su patrimonio, de su fuente de trabajo, de su proyecto de vida.
Subrayó, “somos testigos también de dos formas de afrontar esta tragedia: la de los mexicanos heroicos, aquellos que antepusieron la vida de otros a su propia vida, aquellos que manifestaron su civilidad y nos siguen admirando por su capacidad de donación y desprendimiento. Muchos de estos mexicanos son jóvenes, ese grupo de la población que oscila entre los 15 a los 29 años y que hoy son más de 30 millones de mexicanos, de acuerdo al censo 2015 realizado por el INEGI. En estos mexicanos jóvenes y muchos más, está la esperanza de reconstruir no solo lo que el sismo destruyó, también las posibilidades de progreso y desarrollo, de justicia y paz que nuestro México merece”.
Indicó que la sociedad tiene una deuda con esta juventud, ya que solo uno de cada tres jóvenes entre los 15 y los 29 años asiste a la escuela. Y, “de los 23 mil homicidios registrados en el año 2016, el 50% fueron jóvenes y el 40% de la población encarcelada tiene entre 18 y 30 años. Ante este panorama, como sociedad, debemos actuar de forma responsable y contundente para rescatar a estos millones de jóvenes que reclaman su lugar en una sociedad compleja, violenta y contrastante, pero que no se resignan a esta realidad y buscan colaborar en la construcción de un mejor lugar para vivir”.
El Mtro. Llergo Victoria advirtió, también está la otra forma de afrontar estos acontecimientos, la de aquellos que lucran con la necesidad y el dolor, de aquellos que vuelven la espalda y hacen de su indiferencia la mayor afrenta a una sociedad agraviada y desesperada. “Es el México de la corrupción y la impunidad, de la lejanía con la sociedad, del egocentrismo y la prepotencia, de un México que no puede continuar so pena de condenarnos a la desesperanza, a la polarización social, al encono y a la ausencia del futuro.
En ese sentido, exhortó a los profesionistas que recibieron su grado académico, “ustedes han recibido un don más, un talento más y se comprometerán públicamente para ponerlo al servicio de los otros. El acto académico de hoy, en las circunstancias que nos rodean, no puede ser un acto frívolo y sin sentido, un acontecimiento social para el cual nos hemos preparado con nuestras mejores galas, pero con un corazón frío e indolente”.
Invitó a los galardonados a no ser conformistas. “Al paso de los años, el idealismo y las ganas de cambiar las cosas van dejando su lugar por la conformidad, la comodidad y la complicidad de nuestro tiempo. La conformidad con la realidad que nos rodea, con una violencia brutal y salvaje con la que amanecemos y vivimos todos los días, conformidad con la incertidumbre, sin saber si el día de hoy nosotros o nuestras familias seremos víctimas, conformidad con una realidad que se va volviendo normalidad absurda. Conformidad con los actos de corrupción y de impunidad, conformidad que más parece resignación e indolencia y que nos llevan a la comodidad, ‘mientras a mí no me suceda…’”.
Asimismo, los convocó a que en las diferentes realidades de las que forman parte, su sello como egresados de la UPAEP sea su integridad, denuncien la injusticia, actúen con responsabilidad, vivan con civilidad, con respeto a las diferencias y una sana tolerancia,…además de actuar con inteligencia y generosidad para construir redes de colaboración, sustentadas en un espíritu de servicio y en favor de la paz.
Así mismo, como reconocimiento a su constancia y esfuerzo, 45 egresados del total de graduados de licenciatura y maestría –de las dos ceremonias-, recibieron el premio académico Dr. Abelardo Sánchez Gutiérrez, con el que podrán continuar sus estudios en esta Institución, a quienes invitó a emular el ejemplo de este empresario poblano para hacer la diferencia en la sociedad y ejercer ese liderazgo UPAEP.
En su intervención, el Dr. Mariano Sánchez Cuevas, Vicerrector Académico, también les solicitó a los egresados a poner en práctica su liderazgo transformador, al servicio de los demás y los felicitó por su esfuerzo y dedicación por el estudio y por haber alcanzado el Premio Académico Abelardo Sánchez Gutiérrez.
Don Abelardo Sánchez, fue un hombre visionario que en su tiempo encarnó los valores institucionales de la UPAEP, que dentro de su legado, nos dejó una propuesta de modelo de solidaridad social que sigue vigente hasta nuestros días a través de ese liderazgo transformador al servicio de la sociedad, que promueve el bien común, atendiendo las realidades sociales que estamos viviendo, con diferentes propuestas que mejoren las condiciones de vida de las personas.
En representación de los egresados de la UPAEP, correspondió a la Ing. Gloria Meléndez Roca, Directora Ejecutiva de la Asociación Civil Protección de Cultivos Ciencia y Tecnología A.C., darles la bienvenida y los exhortó a poner sus talentos al servicio de los sectores más vulnerables de la sociedad, con humildad y liderazgo.
Mientras que la protesta de los egresados corrió a cargo de la Lic. Diana Friné Gómez Barón, egresada del programa académico de Contaduría y Alta Dirección.
