Campus
La cultura global necesaria para resolver los problemas mundiales
16 noviembre Por: Fernanda Bretón
Pin It

 

[ UPAEP celebró la Cátedra del Consejo Académico de la Licenciatura en Humanidades.]

 

Las humanidades hoy más que nunca son fundamentales, hoy necesitamos gente con pensamiento critico, precisamos  gente que tenga una sensibilidad mucho más educada y refinada, aseguró el Dr. Roberto Casales García, Director de la Licenciatura de Filosofía y Humanidades de la UPAEP en el marco de la Cátedra del Consejo Académico de la Licenciatura en Humanidades.

Hoy podemos hablar de una próxima globalización cultural, que consistirá en estar conectados de manera inmediata, mencionó el Mtro. Embajador Jorge Alberto Lozoya, Director del Museo Internacional del Barroco, la interrogante, enfatizó, sería qué tipo de diálogo se podrá  establecer a partir de quienes somos cada uno.

El avance de la integración tecnológica, el avance incesante de la guerra y una profunda insatisfacción en el mundo sobre los valores que se llamaban universales, y que no eran para la mayoría de los seres humanos más  que una réplica no muy exacta de algunos de los valores culturales de occidente, fueron algunos de los aspectos que se pudieron detectar que ocurrirían en esta época a partir de un estudio realizado por la Naciones Unidas hace 40 años en el cuál se buscaba responder  a la pregunta de hacía dónde se iba cultural y económicamente.

Explicó que la insatisfacción con los valores culturales imperantes en la comercialización, en los medios de comunicación, en la prensa, es enorme, esto está  produciendo grandes conflictos bélicos.

“Se ha avanzado poco desde entonces en este sentido, es  más a ustedes les toca un mundo menos satisfecho, hay una conflagración de valores y de  objetivos de las principales culturas del mundo”.

Puntualizó que uno de los grandes retos a los que se enfrentan los diplomáticos para disminuir, controlar y acotar los conflictos es la falta de una cultura global.

“Durante todo el S.XX los no occidentales se han ajustado a los criterios y manera de ser del hombre occidental, específicamente de los nórdicos de Europa y de América; en las grandes universidades se cita a los grandes pensadores de occidente y nunca  se hace una alusión a los grandes pensadores musulmanes o hindús”.

Añadió que lo que ha sido una ventaja de nuestra supuesta universalidad o transculturalidad  como pueblos latinoamericanos es muy primitiva, “no hemos logrado acercarnos a los grandes centros del poder cultural, del poder religioso y por ende del poder económico y político fuera de occidente con la fuerza necesaria”.

Finalmente, indicó que la identidad entendida como una manera estrictamente local de ser ya desapareció, ya que las influencias son tan intensas y cotidianas que necesariamente transforman la manera de ser de la persona, “la identidad está en evolución, el capitalismo y el socialismo no tienen identidad, no es necesario despreciar al otro por lo que uno es”.

“Los cambios son incesantes, sociedades tan abiertas y complejas como la nuestra pueden ir absorbiendo todo eso, transformándolo, pero no lo congelan”.

 

 

 

Galerías